RETALES DE UNA VIDA
Mi vida y mis
ilusiones se ven envueltas en una red de confusión que no me permite seguir mi
camino. Infinitas preguntas se agolpan, una tras otra en mi cabeza, esperando
contestaciones que no llegan. Golpean mi mente, haciendo que mi cuerpo y mi
alma caigan enfermos de tristeza. No se quien soy, ni lo que hago en este
mundo. Me encuentro sumido en una grave crisis existencial. Gracias a dios
tengo el antídoto que sanara mi cuerpo y devolverá la ilusión a mi alma, tengo
el Amor a mi lado, por eso nunca, he caído en la desesperación absoluta, ni la
he conocido.
De esta manera
y no de otra, comienza una dura labor de reconstrucción. Una obra que dura
aproximadamente nueve meses, y en la que trato de eliminar las capas y capas de
absurdas herencias familiares y sociales que mantenemos como la verdad absoluta
que guía nuestras vidas. Pensamos que nos representan, que somos aquello que
sabemos y que creemos, pero lo cierto es que lo aprendimos y ahora lo repetimos
una y otra vez, haciendo nuestro lo que en muchísimas ocasiones, no nos
pertenece.
Todo comenzó cuando una fotografía de mi infancia cayo en mis manos por
causalidad, el efecto que tuvo fue determinante, pues sin pretenderlo surgieron
de mis adentros, miles de fotografías y recuerdos que hicieron el resto. Como
la llorona cebolla que se despoja de
pieles marchitas para descubrir la blancura y frescura de ese niño, fueron
gestándose cincuenta y cinco Collages que me descubrieron tal y como soy en
realidad, incluidos mis dones y mis defectos, y que terminaba con un nuevo
comienzo, el propuesto por el collage último que lleva por titulo “La infancia
Adulta”. 
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